Espero que estas letras te encuentren con entusiasmo.
Que el reclamo a la santidad, que es la Cuaresma, sea un reclamo a un corazón abierto, generoso y disponible que no tenga miedo de reconocer a Cristo en todas y cada una de las exigencias, que Él, venga a pedir a nuestra vida cotidiana.
No se trata simplemente de esperar hasta el día del Juicio Final para que nos digan: “tu a la derecha y tu a la izquierda”; es en el camino cotidiano, donde tenemos que empezar a abrir los ojos.
Mis oraciones siempre por ti....
No hay comentarios.:
Publicar un comentario