Espero que estas letras te encuentren con entusiasmo.
El otro día recomendé un libro a un amigo, y me dijo que no lo leería jamás porque a pesar de reconocer que el autor era muy bueno, este no le caía bien. Me sorprendió que alguien dejará de leer algo no por motivos éticos, ideológicos o estéticos... sino por discrepancias con el carácter del autor.
Esto de “caer bien” lo encuentro demasiado subjetivo, ya que es un concepto indefinido sometido plenamente a las emociones del momento. Hoy me caes bien y mañana no.
Un servidor, tiene en su lista de artistas favoritos un montón de genios insoportables que tampoco “me caen bien”. De hecho casi todos los artistas tienen un punto de soberbia que a menudo los hace insufribles. Pero en muchos casos su obra los supera y se alza por encima de su carácter e ideología aportando algo positivo al espectador, oyente o lector. Creo que se puede admirar la obra de un artista sin tener que simpatizar con el propio artista necesariamente.
Iré aún mucho más lejos : creo que se puede ser amigo de alguien que “te caiga mal”. Si la amistad se basa en el amor no veo impedimento alguno en amar a alguien diferente a ti. Todo lo contrario : al amar a una persona con un carácter diferente al tuyo estas demostrando ser mejor amigo. Evidentemente para poder hablar de amistad este amor ha de ser correspondido...
Lo común será que nuestros amigos nos caigan bien pero siempre nos encontraremos con aquella persona que tiene aquel defecto o que piensa aquello otro...entonces es cuando hay que quitarse la viga del ojo para poder ver que nosotros tampoco somos perfectos y que quizás más de uno este haciendo un esfuerzo tremendo para soportarnos. ¡Santa paciencia!
Mis oraciones siempre por ti....
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