lunes, 9 de febrero de 2009

Dar y Darse a los demás


Espero que estas letras te encuentren con entusiasmo.


Los genios son genios no por lo que producen, sino por lo que proyectan, por lo que reparten. Un genio no es un hombre que tiene el alma muy grande, sino un hombre de cuya alma podemos alimentarnos. En los santos la cosa es aún más clara: son santos porque no se reservaron nada para sí, sino que se entregaron a todos cuantos les rodeaban.


Una sonrisa a quienes suben con nosotros en el elevador. Una atención y un recuerdo en la oración para quien nos pide ayuda por la calle. Cosas sencillas pero que, a los ojos de DIOS, tienen un valor inmenso. Los genios, los grandes santos, lo han sido a base de estos pequeños pero valiosos actos de amor y generosidad. Y tú, ¿qué esperas para ser feliz?


Mis oraciones siempre por ti....

1 comentario:

° Marilyn ° dijo...

¡Hola Turo!

Hay mucha razón en tus letras,
-poner atención en los pequeños detalles-
siempre es un gusto leerte!!

Un abrazo, qué estés muy bien!!