Espero que estas letras te encuentren con entusiasmo.
Pidamos a DIOS la gracia de ser profundamente humildes y sencillos de corazón, para creer en Él con una fe viva, para confesar y proclamar públicamente a CRISTO.
Pero esta fe, para que sea auténtica, debe ser operante y práctica;es decir, ha de envolver toda nuestra persona y nuestro ser entero. No se trata de algo meramente intelectual o de una aceptación racional de las verdades del dogma católico. Es, más bien, confianza absoluta en DIOS nuestro Señor, en su poder y en su misericordia; abandono total al Plan de DIOS.
Mis oraciones siempre por ti....
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